Maimónides llegó a Fez en 1158 cabalgando en la tormenta de la persecución almohade, de Córdoba a Almería y, finalmente, a la ciudad marroquí. Aquel Islam de aquel momento del siglo XII poseía una voz potente y violenta, consecuencia de un planteamiento maximalista irreductible: atribuir cualidades a Dios es atentar contra su unicidad y ello exige la aniquilación de todo lo que se salga de ahí. Pensar es el mal. Muchos judíos, cristianos y musulmanes sufrieron muerte, tortura o exilio por ello. Ampliar «Esperando un tiempo de gracia»
El año en el que aprendimos a lavarnos las manos descubrimos el agotamiento por hipoxia social. Fue un tiempo en el que envidiamos a los anacoretas: a Nietzsche, a san Bruno, a quienes se habían ido a vivir al bosque porque no soportaban el ruido y se habían quedado sordos a la propia voz. También perdimos el habla, silenciados por las tormentas de mierda de las redes sociales profetizadas por Byung Chul Han. Aprendimos a leer y releer en la clandestinidad, a buscar la calma en las charlas de corresponsales sin gritos de emisoras minoritarias, a recuperar a Dickens y a Batman por Navidad sonando de fondo los monjes de Silos y a buscar a Bach en una primavera más que nunca fantasmal. A estudiar ruso para entender mejor la geopolítica de las vacunas, a Pushkin y a los Romanov. Sufrimos el zarpazo de la añoranza de una buena conversación, sin dudas sobre si quien tienes enfrente está sobremedicado de diazepam. Las desapariciones súbitas, como en una dictadura de ogro militar. Los adioses largos, languideciendo en los grupos absurdos de Whatsapp. La prórroga del fin del mundo en mitad de la banalidad. Y, de fondo, como una radiación cósmica primigenia, la gran pregunta de siempre: qué relación tiene la vida con la verdad. Aprendimos qué es la libertad y que su precio siempre es una libra de carne propia que casi nadie se atreve a pagar.
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La innovación social es un viaje que comienza en la búsqueda personal de la libertad esencial. Ese viaje transcurre avanzando a través del compromiso inteligente con una realidad definida por un horizonte compartido entre semejantes. A lo largo del camino, emergen algunos hallazgos que se van erigiendo en fuentes de sentido: esos hallazgos son la innovación. Ampliar «Procesos de innovación social»
Tengo un amigo, reputado sociólogo y ahora involucrado en la alta política, que dice que no aprenderemos mucho de la crisis del coronavirus. Cuando pase la purga y nos repongamos de sus efectos más duros, volveremos a montarnos viajes absurdos a Venecia y a París, a gastar, a comer y a desgarrar el globo terráqueo. Entenderemos todo esto que nos está ocurriendo como una distopía pasajera y nos comportaremos como si aquí no hubiera pasado nada. Eso dice mi amigo, que no es precisamente un aficionado al cuñadismo. Ampliar «Renacimiento o Mad Max»
No he podido evitar sentirme incómodo al oír hablar al presidente del Gobierno de España de la necesidad de conducirse con disciplina social ante la crisis del coronavirus. Disciplina social. Ampliar «Disciplina social»
El agotamiento de los relatos de las filosofías de la deconstrucción ha terminado por afectar a la mismísima imago mundi contemporánea. A la definición del entorno en el que transcurren vidas y azares. La realidad abandona un estado líquido que se creía permanente y se solidifica en moldes siempre provisionales pero asumidos como válidos ante la conciencia radical de la transitoriedad de la vigencia de las narrativas que embridan el transcurrir de las sociedades humanas. Las historias unidimensionales de los medios de comunicación y de la evidencia científica han cedido sus lugares de privilegio a la extracción y modelaje de cargamentos ingentes de datos, dejando a la causalidad atrás, como una autoestopista galáctica a la que se dice adiós desde el espejo retrovisor. Bienvenidos a las nuevas colonias mineras de la información. Ampliar «Datos y redes: conectografía en 3D para el mundo real»
El funcionariado y los intelectuales fueron instituciones sociales que modelaron la sociedad del siglo XX en los países europeos occidentales. Las señales de fatiga que muestran hoy anuncian el ocaso del Estado del Bienestar tal como lo conocemos. Ampliar «Impugnación o reforma»
¿Cómo funciona el reparto global de vacunas? ¿Qué rutas sigue? ¿Qué países exportan y qué países reciben vacunas? ¿Hay relaciones de tráfico de doble sentido, países que entre sí comparten sus respectivos stocks vacunales? ¿Cómo es el mapa del comercio mundial de vacunas? ¿Qué razones económicas, sociales, éticas, culturales o geopolíticas pueden ayudar a entender mejor este asunto sobre el que es tan fácil opinar desde el cuñadismo más obtuso? La conectografía puede ser útil para entender mejor la complejidad de estos procesos, de indudable interés público. El grafo que ilustra este post es expresión de ese análisis. Ampliar «Vacunas y conectografía»
En algunos de los debates hoy abiertos sobre la necesidad de identificar fuentes de sentido para la vida de las organizaciones (instituciones, empresas, comunidades), se plantea la necesidad de dar por superada la idea de gestión responsable como principio vertebrador y sustituirla por la de gestión ejemplar. Es un plus de exigencia ética que tensiona a las organizaciones para hacerlas más creíbles, una boqueada desesperada buscando oxígeno en un medio ambiente del que ha huido la legitimidad de origen, la presunción de honorabilidad. Ampliar «Una gestión ejemplar»
La corriente salubrista de impulso a los impuestos sobre las bebidas azucaradas no logra hacerse valer. En España, solo Cataluña dio el paso en 2017 de aplicar una tasa. Las demás comunidades autónomas y Gobierno central no han podido hacerlo, a pesar de las perspectivas recaudatorias de la medida: han pesado más las consideraciones relacionadas con el riesgo de destrucción de empleos en este subsector de la industria alimentaria que el asunto de los riesgos para la salud. Ocurrió así en la negociación de los Presupuestos Generales del Estado de 2017 y en la de otros proyectos regionales, como la Ley para la Promoción de una Vida Saludable y una Alimentación Equilibrada de Andalucía. En el primer caso, Ciudadanos frenó el intento del PP; en el segundo caso, también, sólo que el proponente era (es) un gobierno del PSOE. Ampliar «Refrescos, salud y arquitectura fiscal»
¿Qué hace falta para que los pacientes, como colectivo, se echen a la calle ante alguna situación que les resulte lesiva? ¿Son capaces los pacientes de protagonizar por sí mismos una verdadera movilización social? Ampliar «Lazos débiles, pacientes y movilización social»