El omalizumab es un anticuerpo monoclonal humanizado obtenido mediante recombinación de ADN a partir de células de ovario de hamster chino. A partir de esa base, la compañía Novartis desarrolló y patentó un medicamento, Xolair, que desde hace una década se utiliza en determinados casos de asma grave y que ahora acaba de recibir luz verde para una nueva indicación en España, formalmente desde el día 1 de octubre de 2015: las urticarias crónicas (más allá de seis semanas de duración) que no responden a los antihistamínicos.
Una de las ciudades donde Novartis quiso comunicar al público en general a través de los medios de comunicación la existencia de esta nueva alternativa para mejorar la situación de las personas con urticaria crónica fue Sevilla. En este evento de presentación participaron Stefan Cimbollek, alergólogo del Hospital Universitario Virgen del Rocío, de Sevilla; Cristina Ballesteros, del Área de Inmunología y Dermatología de Novartis en España; y José Carlos Armario, dermatólogo del Hospital Universitario de Puerto Real, de Cádiz.
Según explicó Cristina Ballesteros, “es un verdadero orgullo para Novartis presentar esta última innovación que, estamos seguros, cambiará el paradigma de tratamiento de las personas con urticaria crónica espontánea refractaria a antihistamínicos H1”.
Por su parte, José Carlos Armario, desde el punto de vista dermatológico, hizo hincapié en el impacto de la urticaria crónica sobre la calidad de vida de los pacientes: “Imagínate una persona joven que día sí, día no, amanece con la boca hinchada, un ojo cerrado, etc. El día que te ocurre, condiciona tu vida laboral, tus relaciones sociales, te hace perder muchas horas en urgencias… En definitiva, la calidad de vida es muy mala”. Según este especialista, “sobre una población teórica de ocho millones de habitantes, en Andalucía puede haber unos 45.000 ó 50.000 habitantes con urticaria crónica espontánea, ya que la prevalencia nacional es del 0,6%, ligeramente inferior a la mundial, que es del 1%”.
“Sobre una población teórica de ocho millones de habitantes, en Andalucía puede haber unos 45.000 ó 50.000 habitantes con urticaria crónica espontánea, ya que la prevalencia nacional es del 0,6%, ligeramente inferior a la mundial, que es del 1%”
El alergólogo Stefan Cimbollek precisó asimismo que “la urticaria es la cuarta causa más frecuente de consulta al alergólogo, por detrás de la rinitis, el asma y la alergia a medicamentos”. Cimbollek aclaró que, para tratar la enfermedad, “las guías clínicas de manejo recomiendan comenzar con antihistamínicos de segunda generación a dosis elevadas, con lo que se estima una respuesta aproximada de casi la mitad de los pacientes. El uso de otros medicamentos como los antileucotrienos o los anti-H2 no aportan ningún beneficio adicional en los pacientes que no responden al tratamiento”, pero “la aprobación de omalizumab para esta indicación permitiría tratar a los pacientes refractarios con una tasa de respuesta de al menos el 65%”.
Xolair es un medicamento de diagnóstico hospitalario, incluido para las indicaciones de asma y urticaria al mismo precio en las prestaciones del Sistema Nacional de Salud; el tratamiento de seis meses de duración supone un gasto por paciente de unos 3.600 euros.
Los expertos participantes en este lanzamiento de la nueva indicación de Xolair para urticaria crónica destacaron la importancia de crítica de identificar correctamente a los pacientes candidatos a recibir este tratamiento y, para ello, abogaron por el avance en la mejora de la coordinación entre profesionales clínicos y, también, entre escenarios asistenciales.
Fotografía: de izquierda a derecha, Stefan Cimbollek, Cristina Ballesteros y José Carlos Armario.
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