Fotografía: Galería Flickr de Johan J.Ingles-Le Nobel. Algunos derechos reservados.
Alfonso Pedrosa. A través de un post de Agustín Salaberry en Alt1040 he sabido de esta investigación, publicada en Biophysical Journal, de la que da interesantes detalles el blog de la Universidad de Oxford.
Es en la interacción del ojo de algunas aves con el sol donde puede estar la explicación del sistema de orientación magnética de los pájaros. La relación fotón-electron es lo que haría que esas bandadas sepan ir a donde van.
Poderosa metáfora, sí señor. Me he acordado de la netocracia y, también de una iniciativa colaborativa de la Red, Mírame, diferénciate, que busca humanizar la realidad cotidiana de la asistencia sanitaria y en la que hay implicadas personas a las que respeto y aprecio.
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