Alfonso Pedrosa. El programa Medicare es conocido administrativamente como la Parte D del presupuesto del Departamento de Salud de EEUU. La Parte D, que se va en recetas para personas de bajo nivel de ingresos, suma unos 67.000 millones de dólares y da cobertura a unos 36 millones de ciudadanos. La gestión corresponde a las diversas entidades de aseguramiento adscritas al programa.
 
Una inspección del Gobierno federal acaba de desvelar que en torno a la mitad de esas compañías, algunas de gran tamaño, no reportan incidencias en la tramitación de las prescripciones. Y eso ha desatado el interés por saber qué está ocurriendo.