La protección de la infancia y de la mujer es la misión de la Fundación Madrina,  con especial atención a gestantes y madres con hijos pequeños en situación de riesgo, abandono y violencia.

Esta ONG ha hecho ahora un llamamiento para que se preste más atención a la situación de madres con discapacidad. El caso de F. W., refugiada siria que llegó a España procedente de Turquía con tres hijos, otro en camino y el 84% de discapacidad, ilustra con elocuencia la situación.

Tras varios esfuerzos para ser acogida por alguna institución sin resultado, F. W. finalmente pudo vivir en un piso tutelado de la Fundación Madrina en Madrid, situación prolongada durante tres años. La vivienda hubo de ser adaptada y para atender a esta mujer y a sus hijos la ONG puso a su disposición un equipo de cuidadores las 24 horas del día. Ahora, la Empresa Municipal de Vivienda de Madrid se ha implicado en el caso y esta mujer vivirá con sus hijos a partir de ahora en una vivienda oficial adaptada, pagando un alquiler social.

La Fundación Madrina explica que tiene varios centros y pisos de acogida, todos ellos tutelados o bien en régimen de autonomía e inserción laboral, para madres gestantes jóvenes y con hijos a cargo menores de 3 años, «con el fin de que en un periodo de tiempo de entre 6 y 18 meses puedan vivir autónomamente con sus hijos».
Las madres acogidas en la Fundación, según informa la propia ONG, «son especialmente vulnerables, y carecen de red familiar y social». Además, «muchas han sido víctimas de violaciones, trata de personas, violencia, abuso y todas ellas son excluidas socialmente».

Imagen: Fundación Madrina.