Alfonso Pedrosa.- El concepto de equivalencia terapéutica que maneja el Servicio Andaluz de Salud (SAS) no convence a los pacientes de hemofilia. Por ello, la Asociación Andaluza de Hemofilia (Asanhemo) ha informado de la interposición de un contencioso contra la decisión del Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales (TARC) de esa comunidad autónoma que dice que es legal que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) pueda elegir entre diferentes medicamentos (considerados equivalentes entre sí desde el punto de vista de su eficacia terapéutica por la Administración) en función del precio que consiga en su licitación pública para tratar esa enfermedad. Para Asanhemo y otras organizaciones de pacientes relacionadas con la hemofilia, con este procedimiento se obvian ciertas peculiaridades clínicas que invalidan la equivalencia real entre los diferentes medicamentos invocada por el SAS.
 
Según Asanhemo, sólo mediante ensayos clínicos controlados por autoridades independientes que comparen los medicamentos entre sí se puede establecer si éstos son realmente equivalentes. Esta organización de pacientes reconoce que en el acuerdo marco del SAS sobre Alternativas Terapéuticas Equivalentes, que regula entre otras patologías el caso del factor VIII para tratar la hemofilia, se deja margen al médico para determinar otra prescripción específica diferente a la de la licitación, pero, sin embargo, la asociación de pacientes teme que esos otros medicamentos no estén a la hora de la verdad disponibles para los médicos, ya que habrían quedado fuera de la licitación del SAS.