Me gustan los análisis de la realidad social, política, cultural, económica, que apuntan hacia lo trasnacional, hacia la superación de moldes que no hacen más que estorbar las relaciones entre las personas. Por eso traigo hoy aquí la referencia del último informe La Península ibérica en cifras, del INE.

Un análisis conjunto de lo que pasa en España y en Portugal, por diversas razones, como viene haciendo el INE, me parece especialmente pertinente. Por evidentes razones históricas; por la potencia estratégica de una raíz idiomática compartida; porque lo poco que conozco de ese país, que son algunas personas relacionadas con él, me gusta; porque la situación de emergencia económica puede ser una gran oportunidad para sumar, para caminar juntos de una vez; porque, simplemente, estamos juntos, por mucho que a uno y otro lado de la raya nos empeñemos en gestos que dicen lo contrario.

En el informe del INE de 2011 hay un apartado dedicado a la salud y a la protección social. No contiene datos espectaculares, pero alguno de ellos ayuda a borrar algún que otro prejuicio e invita a reflexionar: el esfuerzo relativo de Portugal en ese ámbito, en términos de PIB, es mayor que el que hace España. Y ninguno de los países llega al nivel medio de la UE27. Y, sobre todo, cambiar la perspectiva redecora la percepción de las cosas: como muestra el pantallazo que ilustra este post, existe una variabilidad compartida en cifras como la del número de médicos colegiados por millar de población.