Juanma Cáliz.- Madrid, Cataluña, Galicia y Baleares son, por este orden, las comunidades que presentan un mayor grado de privatización, mientras que en el polo opuesto se encuentran Extremadura, Castilla la Mancha, Asturias y Andalucía.
Así se desprende del ‘Segundo Informe: la Privatización Sanitaria de las CCAA’que ha presentado este miércoles la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), que relega a un grado medio de privatización al resto de regiones del país.
Entre las variables evaluadas por este organismo para elaborar su informe se encuentran el porcentaje de población cubierta por mutualidades de funcionarios; el gasto en seguros privados per capita (€/año); el gasto sanitario de bolsillo per capita (€/año); el porcentaje de camas hospitalarias privadas sobre el total; el porcentaje del equipamiento de alta tecnología en hospitales privados sobre el total; el porcentaje del gasto sanitario dedicado a contratación con centros privados, y la presencia de modelos de la llamada "colaboración público- privada"
No obstante, la FADSP puntualiza en su informe que las cifras de contratación del sistema público con el sector privado "están infraestimadas" por dos motivos: "la presencia del modelo MUFACE, que en su mayoría dedica fondos públicos a financiar seguros privados, y porque existen muchos casos de contratación directa de los centros sanitarios con el sector privado (pruebas diagnósticas, etc) con lo que estas partidas no aparecen contabilizadas de manera diferenciada y se incluyen en los presupuestos de los centros públicos".
Del mismo modo, esta federación de pacientes sostiene que los fenómenos de privatización han tenido una intensidad variable, según las CCAA y atendiendo "tanto al grupo político en el gobierno como a otras circunstancias". En cualquier caso, advierte, el fenómeno privatizador se profundizo y diversificó a partir de la finalización de las transferencias sanitarias en 2001 y del primer gobierno del PP a nivel central, "y se ha acentuado en los últimos años en los que la sanidad pública está siendo sometida a un proceso acelerado de recortes, deterioro, desmantelamiento y privatizaciones desde el gobierno central y los de las CCAA".
FALTA DE TRANSPARENCIA INFORMATIVA Y CONCLUSIONES
Además, ha aprovechado para criticar la "reiterada falta de transparencia informativa" como uno "de los grandes déficit de nuestro sistema sanitario", de manera que "resulta complicado obtener datos concretos de las administraciones sanitarias". Con estas limitaciones, alegan desde la FADSP, han analizado el grado de privatización de los servicios sanitarios de las CCAA.
Sea como fuere, la FADSP revela entre sus principales conclusiones que el proceso de privatizaciones continúa prácticamente en todas las CCAA y que el gasto sanitario privado se ha incrementado en un 7,3% en el último año, fundamentalmente debido a los copagos y a los recortes en la sanidad pública (se produjo un recorte presupuestario de las CCAA del 13,7% entre 2009 y 2013). Sobre esta cuestión también han observado un mayor aumento del gasto privado allí donde más disminuyeron los presupuestos públicos. "Es decir si se deteriora el sistema público se produce un incentivo para que las personas con medios económicos busquen una alternativa en el sector privado", concluyen.