Juanma Cáliz.- Uno de cada diez niños en España padece asma, lo que la convierte en una de las enfermedades crónicas más frecuente en esta población y también entre los adolescentes,  según han puesto de manifiesto este miércoles en una nota la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) y la Fundació Roger Torné. Estas entidades han explicado que el incremento en la prevalencia de esta patología registrado en los últimos años se debe a los cambios de hábitos que se han producido en la población, para lo cual se han apoyado en el estudio ISAAC (The International Study of Asthma and Allergies in Childhood), una de las principales fuentes de información mundial sobre prevalencia de asma. De hecho, el entorno y cómo nos relacionamos con él influyen decisivamente en los síntomas y en la prevalencia de la enfermedad, ya que esta patología se desencadena cuando determinados contaminantes ambientales actúan sobre nuestros genes.

Así lo sugieren múltiples estudios de cohortes que siguen a poblaciones expuestas a ellos incluso desde antes de nacer. Un claro ejemplo que ilustra la relación existente entre asma y entorno es la reducción en hasta un 10% de las hospitalizaciones de niños por asma tras la implantación de la Ley Antitabaco en España. Otro ejemplo es la mejora de la función pulmonar registrada a lo largo de veinte años en niños de California tras reducirse la contaminación ambiental, de acuerdo con uno de los últimos estudios elaborados al respecto.

La exposición al humo de tabaco durante el embarazo es un factor de riesgo para desarrollar asma, ya que aumenta la probabilidad de sibilancias en la infancia, y también lo es la contaminación por tráfico, que influye en los síntomas asmáticos y otras enfermedades respiratorias. Otro factor de riesgo en las ciudades es la pobreza por la combinación de elementos que favorecen el asma, como viviendas de peor calidad situadas en vías de alta densidad de tráfico, peor calidad de los alimentos y carencias de conocimientos sobre dietas equilibradas. Además, las familias desfavorecidas tienen menos oportunidades de salir de las ciudades para realizar actividades en contacto con la naturaleza.

Recientemente, la sociedad científica de los neumólogos y cirujanos torácicos del Sur de España Neumosur ha llevado a cabo un estudio que pone de manifiesto que sufrir una crisis de asma grave predispone también a futuros episodios agudos.