Foto: Foro de Innovación Sanitaria. Vía el Blog de Maite Martínez Lao

Redacción Synaptica. Salud Innova, quizás la única herramienta de participación semiabierta en la gestión del SAS, y única Red Social de la organización definida como tal, ha recibido 59 contribuciones en 2008. Teniendo en cuenta que todos los trabajadores pueden participar, aunque la idea requiera la evaluación y aceptación por parte del Banco de Prácticas Innovadoras, no son demasiadas para un cuerpo de 83.000 profesionales. Pero sí muchas comparadas con las siete de 2007 y las 12 de 2006. Las aportaciones se dividen en tres áreas en las que cabe de todo: Nuevas Tecnologías (especialmente sobre Telemedicina aunque también proponen, por ejemplo, montar una Plataforma Virtual Mundial sobre las voluntades anticipadas), la Innovación organizativa (Evaluación de competencias directivas de jefes de servicio, jefes de sección y coordinadores sectoriales),y la Innovación en las relaciones con la ciudadania (por ejemplo, un programa de Apoyo al Cuidador Principal,"Promover una red social de cuidadores"). El ganador del premio a la mejor Innovación de 2008 recayó en un proyecto sobre educación del asma para profesores de educación física. Pero, cuando innovación se convierte en pocos años en palabro aplicable a un sinfín de cuestiones, vale la pena recoger algunas acepciones curiosas. Innovación es también la propuesta de Teresa Montero Reyes de sustituir los botones en los camisones de las mamás por un velcro para favorecer su comodidad, aportando a la par un "diseño clásico y atractivo muy conveniente para los importantes momentos que están viviendo las mamas y poco tiene que ver con los estandarizados y anodinos diseños de los hospitales". Ojo, el camisón funcional y fashion le ha valido una patente. Además, la revisión de estas prácticas también sirve para detectar algunas sensibilidades de los trabajadores o lagunas del sistema. En su propuesta para instaurar un Libro de agradecimientos y sugerencias, Francisco Javier Sánchez  explica que "a veces nos duele que se nos cuantifique por numero de reclamaciones y no por la calidad de la reclamación en sí". Gerentes, la autoestima profesional, dicen, hay que cuidarla. Otro ejemplo, la primera propuesta de 2009 establece los pasos mínimos que debe seguir el personal de enfermería para entenderse con el Módulo de Cuidados de Diraya para Enfermería (Azahar). "Cuando empezamos a implantar Azahar en nuestro Hospital, en algunas fases del proyecto, a veces por problemas técnicos o de actualización y mejora de la aplicación, podían producirse retrasos en la fecha prevista para la implantación del programa en las unidades seleccionadas", explican. Por eso, han creado reglas nemotécnicas para entenderse mínimamente con Diraya y establecer "los pasos necesarios para elaborar un informe de Continuidad de Cuidados y su envío por fax". La innovación cuenta muchas cosas.